Por causas de la exigencia diaria, no siempre escuchamos nuestro cuerpo. Al solo ocuparnos de la apariencia nos distancia todavía más de sus necesidades. Nos hemos habituado a vivir de espaldas a nosotros mismos, siendo el cuerpo el lugar donde habita nuestro ser más interno: sensaciones, emociones, pensamiento...por otro lado solemos bloquear la respiración antes de cualquier esfuerzo, estiramiento muscular o amenaza posible de dolor.
Con un trabajo corporal continuo, abrimos los canales que traen las partes del cuerpo que hemos olvidado, desconectado o insensibilizado. Son zonas corporales que han dejado de responder a nuestras órdenes de movimiento o bien que no se utilizan con plena conciencia, y que en un plano emocional guardan cierta información y sentimientos contenidos. El trabajo corporal es un proceso de descubrimiento y recuperación de estas partes del ser, que en su momento no se han podido expresar. El cuerpo tiene una ganas inmensas por recuperar su naturalidad y sus movimientos libres. Si se le permite, sin forzar, encontrará su propia autorregulación.
Tenemos el propósito de acompañarnos en un proceso que nos permitirá aflorar esta memoria corporal para que integremos y recuperemos la parte que hemos ignorado de nosotr@s.
La sesión de ejercicio se basa en el Estiramiento de Cadenas Musculares que puedan estar bloqueadas por deporte realizado de forma inadecuada e incluso por motivos emocionales...todo ello se basa en métodos de la dtora Ehrenfried( Gimnasia holística), Elsa Gindler, Mezières (Cadenas musculares), Theres Bertherat (El cuerpo tiene sus razones), Charlotte Selver (Consciencia sensorial), todo ello unido por Jorge Ramón Gomáriz (Estiamientos de Cadenas Musculares).
Aprende a sentir, Siente, aprendiendo
Para! Un minuto de tu día, tan sólo, un momento.
Cierra los ojos, déjate escuchar
Observa que sientes, que piensas, escucha tu latlir
tu respirar, tu adentro
Sé amable, contigo
Relaja tu cuerpo,
que nada te pese
ALIGERA tu peso, tu alma
Tu mente, tu estar...SERENO
Porque te lo mereces, es solo un momento
un minuto de tu día, tan solo eso...
Gracias Rosa